Los días lluviosos se han recibido con alborozo, sobre todo luego de los 88 días de sequía que sufrió el país en el 2024. Obligados a sufrir cortes de luz, que llegaron a prolongarse a 14 horas diarias, racionamiento del agua en algunos barrios de Quito e incendios forestales voraces, quizá en otra circunstancia se habrían publicado memes sobre el frío. No ha sido este el caso, pese a que en enero del 2025 las lluvias en Quito superaron con creces lo esperado, según el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi).
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Un enero con más lluvias en Quito
El exceso de lluvia, fuera de lo normal, no es del todo bueno. Revela también una señal clara de un comportamiento climático anómalo, sostiene ChristIan Paliz, experto del Inamhi, en cuanto a pronósticos del clima. En ese sentido, enero del 2025 superó los registros históricos y previsibles.
Por ejemplo, en Iñaquito, se acumularon 95,7 milímetros de lluvia, cuando lo esperado era de 82,6 mm, casi un 16% más. En cambio, en el sur, hubo un 40% más, pues se esperaban 133,9 mm, pero cayeron 186,9 mm.
Paliz explicó que este patrón de lluvias está directamente relacionado con el fenómeno de La Niña, el cual ha intensificado la entrada de masas de aire húmedo. “La humedad relativa ha alcanzado niveles del 85% al 90%, muy por encima del promedio, lo que ha generado lluvias persistentes y abundantes”, señaló.
El Niño fue algo amable el año pasado
El panorama es completamente opuesto al de enero de 2024, un mes marcado por el fenómeno de El Niño. En ese entonces, las lluvias en Quito fueron deficitarias y generaron preocupación por el abastecimiento de agua.
En cambio, por estos eventos de El Niño, hubo lluvias sobre lo normal en la región litoral, aunque no en exceso, según el Inamhi.
La Amazonía: lluvias sobre lo normal en localidades clave
En la región amazónica, localidades cercanas a las estribaciones de la cordillera oriental, se han experimentado lluvias superiores a las habituales. Estos son dos ejemplos. En Mera (Pastaza), por ejemplo, se esperaban 415 mm. Ya finaliza enero y cayeron 587 mm. En Macas (Morona Santiago), donde el promedio es de 156,5 mm, ya se han acumulado 182,3 mm.
Las masas de aire húmedo provenientes de la Amazonía han sido determinantes para este comportamiento que ha favorecido en mucho para la alimentación de los embalses de los sistemas hidroeléctricos del país.
Los cortes de luz impactaron en el sector energético del país, cuya matriz depende en más del 70% de la red hidroeléctrica. El embalse de Mazar, que abastece al complejo hidroeléctrico Paute, registró caudales mínimos históricos. El 14 de agosto de 2024, el caudal fue de 18,3 metros cúbicos por segundo, cuando el promedio histórico para ese mes supera los 130 m³/s.
Esta reducción afectó la operación de las centrales hidroeléctricas Mazar, Paute-Molino y Sopladora. Ahora es diferente, según las cotas de los principales embalses de Ecuador.
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El aumento de las lluvias y sus consecuencias
Si bien hay ese alborozo porque las lluvias espantan a los apagones, los racionamientos de agua y los incendios forestales, además hay consecuencias que lamentar.
Según la Secretaría de Gestión de Riesgos del Ecuador, desde el 1 de enero, en el país se han registrado 236 «eventos adversos«. Las lluvias trajeron algunas consecuencias en 21 provincias del país.
De manera más específica, se dieron en 80 cantones y 150 parroquias. Los deslizamientos fueron los más frecuentes, con el 54%, y las inundaciones, el 23%. Los siguen los socavamientos, los colapsos estructurales y los vendavales.
El Litoral, la excepción: escasas lluvias en el sur
En el Litoral, la situación es distinta. Guayaquil apenas acumuló 99,5 mm de lluvia en enero, cuando lo esperado era 200 mm. Esto representa un déficit del 50%.
“En el perfil costero y el sur del litoral, los déficits de lluvia van desde el 25% hasta el 60%”, explicó Paliz. No obstante, el norte de la región Costa, en provincias como Los Ríos y Esmeraldas, registró valores dentro de lo normal. Por ejemplo, en La Concordia se esperaban 468,4 mm, y se han acumulado 471 mm.
Proyecciones: lluvias moderadas entre el 4 y el 6 de febrero
El Inamhi proyecta un aumento del contenido de humedad entre el 4 y el 6 de febrero. “El transporte de masas de aire húmedo desde la Amazonía y el océano Pacífico, junto con el paso de ondas tropicales, provocará lluvias moderadas a puntualmente fuertes en algunas regiones del país”, detalló Paliz.
En Quito, se esperan lluvias ligeras y puntuales, aunque podrían intensificarse temporalmente. Por otra parte, en la Amazonía, las lluvias continuarán sobre lo normal, especialmente en zonas cercanas a las estribaciones montañosas. Finalmente, en el litoral, el panorama será parecido a cómo venía desarrollándose.